El CONSEJO ARGENTINO PARA LA LIBERTAD RELIGIOSA (CALIR) hace llegar su solidaridad a los musulmanes y sus instituciones representativas, quienes se han sentido gravemente ofendidos por expresiones vertidas por el animador radial Oscar González Oro, agraviantes hacia el profeta Mahoma.

Lamentablemente, este tipo de burlas y manifestaciones despectivas, cuando no directamente insultantes, se han hecho frecuentes en los medios de comunicación argentinos. En esta oportunidad se ha agraviado a la comunidad islámica, como en tantas otras ocasiones se agravia a judíos, cristianos o creyentes de diversas religiones, minoritarias o no. Cada uno de estos hechos debería concitar el repudio general, sea que el ofendido sea el sentimiento religioso propio o el de otros. La libertad de expresión no es libertad para hacer escarnio de las creencias de los demás, sean o no compartidas.

El correlato de esa libertad debe ser su uso responsable, y la sanción a quienes hagan abuso de ella. Exhortamos a las autoridades competentes a prestar atención a estos hechos y aplicar las correcciones correspondientes, para garantizar una convivencia respetuosa y amistosa entre todos.